Cartagena Diversa: un destino para el fotoperiodismo

Estuve en Cartagena de Indias el fin de semana pasado. Es una bella ciudad de múltiples contrastes sociales, económicos y culturales. Tiene una gran diversidad de estilos arquitectónicos que van del colonial a la vanguardia. La ciudad combina el estilo republicano en algunas casas del barrio Manga, con el encanto de los casas antiguas coloniales de amplios y coloridos balcones.

Castillo Grande un sector residencial, se destaca por los edificios modernos que ofrecen una increible vista al mar y a la Isla Tierra Bomba. Sin embargo, a esta diversidad arquitectónica se suman otros barrios como el Pozón, la Estrella, Mandela, y la Isla del León que cuentan con precarias viviendas donde sobreviven miles de personas, especialmente mujeres en condiciones de extrema pobreza, miseria, vulnerabilidad y vivienda no digna. Además cientos de hombres son habitantes de calle en pleno corazón del Centro Histórico.

La diversidad étnica y cultural la convierten en un excelente ¨exterior,¨ dónde se encuentran las historias cotidianas de sus habitantes, sus problemáticas, su riqueza, sus valores que resultan siendo materia para practicar las distintas técnicas fotográficas y del periodismo, que con dosis de sensibilidad y fuerza narrativa, permitirían visibilizar y contribuir a cambiar la crisis de inequidad social que sufre la mayoría de los habitantes de esta histórica ciudad.

Estudios recientes* señalan que Cartagena tiene una extensión total de 623 km2, y cuenta con una población total aproximada de 1’069.755 habitantes. Su diversidad étnica es producto de su legado colonial e historia de esclavitud. La mayoría de sus habitantes son de raza negra y el 52% del total de la población son mujeres.

Los trabajadores de raza negra y mulatos reciben en promedio salarios 36% más bajos que los de raza blanca, esto se debe a que en promedio su nivel de capital humano es más bajo. Los servicios del sector formal e informal asociados al turismo, la pezca, las ventas de artesanías, frutas, dulces tradicionales y gastronomía de frutos de mar son sus ocupaciones más frecuentes. En general éstas personas residen en los barrios más pobres de la ciudad, como el sector de las faldas del Cerro de la Popa.

La población afrodescendiente ha sufrido una desventaja histórica que les ha marginado su acceso a bienes públicos como la salud y la educación y aún es objeto de discriminación racial como lo han confirmado cientos de denuncias ciudadanas tramitadas en los juzgados.

Cartagena es diversa en cultura, niveles de educación, ingreso, oportunidades sociales, entre otros. Es por esto que el fotoperiodismo además de registrar las majestuosas casas restauradas, los hoteles boutique del Centro Histórico, el desarrollo del Hay Festival y el Reinado Nacional de Belleza, puede captar a través del lente, muchos otros temas de fondo que deben ser denunciados, registrados como noticia, ó algo mejor que eso, como ¨especiales¨ porque la pobreza, el desplazamiento, la corrupción y el racismo ya dejaron de ser nuevas noticias en la Heróica y se instalaron como problemáticas estructurales .

* Informe Pobreza de Cartagena por Barrios del Banco de la República.